Desde 2004, 8 viajes a China. No se puede quejar la suegra, ¿no? 🙂

El viaje esta vez lo hicimos con Emirates, via Dubai. Tiene la ventaja de que volamos siempre con avión de fuselaje ancho (Boeing 777). El cambio en Dubai amplio de horario (3 horas) y espectacular por el aeropuerto. El servicio en el avión no muy diferente de otras aerolíneas, incluso uno de los trayectos (Guangzhou – Dubai) pésimo tanto por la comida como por el trato del personal de vuelo.

Llegando a Dubai a la vuelta

Dado que nos acompañaron mis padres, decidimos pasar unos cuantos días en Hong Kong de turismo, seguido de la correspondiente visita a la familia y amigos en Guangzhou. El alojamiento en Hong Kong lo contratamos en el que tal vez es el hotel scout más grande del mundo: BP International Hotel.

Sobre el mismo escribiré un ampio árticulo en los próximos días en el Blog de La Roca del Consejo.

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Hong Kong es un sitio estupendo para visitar, mezcla de culturas, con infinitas posibilidades de entretenimiento, degustación de comida de todo tipo, compras, e incluso rutas por la naturaleza.

Teniendo el pasaporte español no hace falta visado, al entrar te dan un permiso de estancia de 90 días.

Respecto a los precios, los hoteles son más bien caros y con habitaciones muy pequeñas, la comida y las entradas a lugares turísticos son más o menos baratas, y el transporte público también algo más barato que en España.

Hong Kong de noche

Mezcla de moderno y tradicional

Una de las actividades principales de Hong Kong fue una visita a Ocean Park. Una mezcla de zoo y parque de atracciones, todo ello situado en una montaña junto al mar con unas vistas espectaculares.

Nikita en Ocean Park Oso panda en Ocean Park

Ocean Park - Hong Kong Ocean Park - Hong Kong

Tras unos estupendos días en Hong Kong, cogimos el tren (2 horas) hasta Guangzhou. Para ello necesitamos los visados que previamente habíamos gestionado en Madrid, y cuyo trámite cada año es más complicado y más caro.

En los siguientes días, y hasta el regreso a España, nos dedicamos a acudir a constantes invitaciones de familiares y amigos para desayunar, comer y cenar. Y en los tiempos libres visitamos el centro de la ciudad (que están renovando completamente) y fuimos de compras.

Cenando con la familia

Torre de Guangzhou

De nuevo, y como cada vez que he ido a China, quiero resaltar el estupendo trato por parte de mi familia y amigos de Guangzhou. Muchas gracias a todos.