Acabo de aterrizar en España tras haber tenido la suerte de pasar el año nuevo chino en Guangzhou con la familia de mi mujer, con sus amigos, sus ex-compañeros de trabajo, y puedo decir que pocas veces en mi vida me he sentido tan bien recibido y tratado en todos sitios estando lejos de casa.

Narciso, flor típica del año nuevo chinoMolinillos de viento en Tian He

Cada detalle, cada gesto, cada minuto vivido me han emocionado y me han hecho sentir bien, y actualmente y tras seis viajes y muchas semanas pasadas por aquellas tierras, me siento muy unido al gran país que es China y a su gente, e incluso me da un poco de envidia y rabia estar tan lejos.

El buey, símbolo del año entranteArroz

He subido un buen puñado de fotos a un nuevo álbum de Flickr, China 2009.